viernes, 28 de agosto de 2015

Por fin lo conseguimos!

¡Sí,la terapia de reemplazo enzimático ya es una realidad para nosotros!
Hace  tres semanas  que Victor  empezó a recibir tratamiento con  Vimizim,el ansiado fármaco que por fin podrá frenar el avance de su enfermedad.Una gran noticia,sin duda la mejor que podíamos tener y que  llevamos esperando desde hace mucho tiempo.Estamos muy contentos y esperamos que esto sea un punto de inflexión y un nuevo comienzo .
Llegar hasta aquí no ha sido fácil un camino fácil.Como muchos  sabéis,en los últimos meses hemos tenido que realizar movimientos y estrategias buscando  la presión social y mediática para acelerar la situación de la autorización del medicamento en Cataluña.
Al final,lo hemos conseguido.La comisión que valora este tipo de fármacos en Cataluña ha estudiado las solicitudes que cumplían ciertos criterios de inclusión  y  han autorizado un total de cinco peticiones .Unas estadísticas muy buenas si comparamos con la otras CCAA (sólo seis pacientes  en tratamiento repartidos entre cinco CCAA).

De momento,la realidad en este país a casi un año y medio de que se aprobara en Europa,es que el tratamiento sigue sin estar comercializado y tan sólo se puede pedir bajo "uso compasivo".Un término que deberían actualizar porque que suena feo ,rancio y cargado de connotaciones negativas que nos transportan a otras épocas.Los afectados por una enfermedad minoritaria no necesitamos compasión,ni misericordia ,ni caridad.Necesitamos justicia,igualdad y solidaridad...ni más ni menos.

No se entiende que este tipo de medicamentos tan necesarios y tan vitales para algunas personas que no tienen otro tipo de opción terapéutica , tarden hasta dos años en autorizarse en España.Es algo que nos complica mucho la vida a los afectados y que hace que las CCAA tengan que realizar autorizaciones excepcionales fuera de los protocolos de actuación establecidos.En muchas ocasiones estos procesos son económicamente más costosos  porque hay que comprar como "medicamento extranjero",y el precio suele ser mucho más elevado.Todo esto hace que se convierta en una "`patata caliente" para los gobiernos autonómicos y en una lotería para los afectados dependiendo si vives en una zona u otra del territorio nacional.
A los pacientes,todo este sistema laberíntico no nos debería preocupar,¡bastante tenemos ya,pero es inevitable que nos tengamos que ver inmersos en todo este "fregao" para poder saber donde estamos y que debemos hacer.Por experiencia ya hemos aprendido que si no te mueves,es difícil conseguir algo.
En todas las CCAA,no ha habido ningún tipo de reacción o respuesta a las solicitudes hasta que no se ha hecho presión.Todos los usos se están concediendo a  "cuentagotas" y de un modo forzado  porque a ningún gobierno autonómico le gusta pagar de su bolsillo un medicamento que debe estar en la cartera básica de la Sanidad pública.
Por suerte hoy en día tenemos una herramienta muy potente,que es la información inmediata que nos proporciona la red,y que nos permite estar conectados a nivel internacional con la actualidad médica y científica .Los afectados ya no jugamos en desventaja como hace años,ahora tenemos mucha información.
A medida que vayan apareciendo nuevos medicamentos huérfanos en el mercado,habrá más padres que alcen la voz para reclamar el derecho a la asistencia sanitaria universal,esa de la que tanto presumen los políticos de nuestro país.Nadie está para esperar por líos burocráticos ni medias tintas,mientras su hijo se va muriendo cada día un poco más.
Esperemos que todo esto sirva para generar un profundo debate entre el gobierno y las CCAA .Que empiecen a unir  esfuerzos y criterios para que todos los afectados por algunas ER tengan las mismas oportunidades terapéuticas. 


Víctor en su tercera sesión semanal.

miércoles, 25 de marzo de 2015

Por fin una buena noticia.

Las autoridades sanitarias de la Junta de Castilla y León, han autorizado el
tratamiento con Vimizim a María.
Sera tratada con este medicamento de los laboratorios Biomarin en el Hopital Rio Hortega de Valladolid.
Espero que esta autorización ayude a que se traten al resto de los enfermos con síndrome de Morquio














Por mi parte yo también tengo una buena noticia, después de estar por mas de un mes sin tratamiento, porque la ora social, habia dejado de pagar, dejándonos no solo a mí sino a muchos otros pacientes, con los distintos tratamientos que estamos realizando, en la nada misma, ahora se regularizó todo y el miércoles que viene, vuelvo a realizarme las infusiones

sábado, 7 de marzo de 2015

¿QUE TIENEN DE ESPECIAL LAS MADRES DE NIÑOS ESPECIALES?

En primer lugar, tienen un poder de reacción que es envidiable. Todas han debido superar el trance del diagnóstico y sacar fuerzas de flaqueza.
Pensemos que, después de recibir la noticia, nada es igual, ya no es igual ni el sol ni la lluvia, ni son iguales los bebés ni las mamás…todo cambia, es el antes y el después del diagnóstico. Y, ante este cambio, el ancla es la madre, es la que reacciona, devuelve la serenidad, tranquiliza, es la que busca la información, es la que aprende, es la que enseña.
De golpe y porrazo su rol de madre se ha visto complicado y ella nunca había considerado siquiera esa posibilidad. Esa madre, dispuesta a ser simplemente madre, ha debido aprender a cumplir tantos roles… médico, enfermera, terapista, maestra, al tiempo que cumple su papel de madre. Debe soportar que se desdibuje su rol y que a veces prive lo que no es pertinente al proyecto primigenio; debe aceptar de buen grado la intromisión de una persona “de afuera” que le enseña cómo relacionarse con su hijo, que le indique todo… cómo darle de comer, cómo hablarle, cómo cantarle, y además debe acudir animosa al examen semanal en el que deberá rendir cuentas de lo hecho.
Las madres especiales ven a su hijo especial a través de un cristal de tinte distinto… lo aman, lo miman, lo protegen, lo cuidan y lo evalúan constantemente… quizás sólo lo miren como hijo cuando esté dormido y cuando no tengan que ver si saca la lengua o se sienta con las piernas abiertas o se le desvía un ojo…
Las madres especiales también se ven presionadas por el entorno, se sienten siempre en situación de examen; van por la calle escudriñando la expresión de los caminantes, van al jardín de infancia atemorizadas por un posible informe negativo de la maestra, van de compras pretendiendo que su hijo sea un dechado de cualidades porque sienten que eso les exige la sociedad; van, temerosas, ante las docentes y terapistas a preguntar el por qué de una metodología o de un objetivo cuando, si fuese un niño común, directamente cuestionarían el tema y lo llevarían ante una reunión de padres de clase… pero allí son las únicas, están solas y no se animan a plantear un tema como ése a los demás…
Los demás miran los logros de sus hijos con asombro y se lo hacen saber en forma de “elogio simpático” y ellas siguen sufriendo en soledad porque les marcan las diferencias y no las similitudes. No falta quien, ante el niño especial en una fiesta infantil, pregunten si toma Coca Cola y hay que tener mucha presencia de ánimo para responder “si hay, sí; si no, jugo por favor”… Y cuando la madre va a buscar al niño, no faltará la abuela que le comente “viera lo bien que jugó y cómo se reía con el payaso” y la madre hará de tripas corazón y asentirá con una sonrisa…
Las madres especiales tienen el privilegio de conocer momentos de profunda felicidad y satisfacción que las madres comunes, a veces, no saben apreciar… cada logro, cada progreso serán motivo de una alegría sin par y les darán fuerzas para seguir adelante, poniendo una canción en su corazón que perdurará en los momentos de desaliento.
Las madres especiales trabajan y reeducan a tiempo completo… no lo deberían hacer, pero es tal el ansia de ver bien a sus hijos, de alcanzar las metas deseadas, que no cejan y siempre incorporan lo pedagógico en las circunstancias más informales. Cuando discuten una alternativa de tratamiento y plantean que no están conformes con la misma, deberán soportar que algunos las miren con suficiencia como planeando que “aún no han asumido la realidad del diagnóstico” y ellas deberán retirarse, sumisas (salvo algunas que son las que “rompieron las cadenas”, sabiendo en su fuero íntimo que tienen razón por tener aspiraciones para sus hijos y debiendo conformarse con lo que “graciosamente les conceden”.
Las madres especiales parecen ser madres de ciudadanos de segunda, y se espera que agradezcan cualquier concesión ya a veces, si no han recibido la ayuda oportuna, caminan por la vida como pidiendo disculpas por lo ocurrido.
Lo terrible es que las madres especiales tienen días de veinticuatro horas como el resto de las madres y en ese lapso deberán atender a todo lo estrictamente pertinente a su rol, también a lo terapéutico y, por si esto fuera poco, deberán sobreponerse a los obstáculos, superar los prejuicios, enseñar con el ejemplo y tener una paciencia de santas.
También las madres especiales deberán contar con una dosis de realismo superlativo que le permita aceptar que su hijo no ha alcanzado ni alcanzará esos objetivos que se habían fijado con anterioridad, aceptar que su hijo no tiene el rendimiento óptimo que le permitiría aspirar a esos resultados que aparecen en los libros y en los medios de comunicación; deberán reconocer esta situación, aceptarla y, sin bajar la guardia, plantearse nuevos objetivos más acordes con esa persona que es su hijo. Ellas sentirán, en ese momento, que están solas, que fracasan, que hicieron algo mal… y deberán superar solas ese momento de honestidad.
Por eso nos pareció que hoy debíamos reflexionar acerca del papel de las madres especiales, que muchas veces (afortunadamente) están acompañadas por padres especialísimos que se arremangan y se meten en el fragor de esta lucha, y rendirles el justo reconocimiento que su tarea merece.

lunes, 2 de marzo de 2015

“Saber que existe un fármaco para una enfermedad rara y no recibirlo crea daños irreversibles”


Seguir con sus vidas es lo que desean miles de pacientes con enfermedades raras y sus familias. La Agencia Europea del Medicamento tiene aprobados 81 fármacos destinados a estas enfermedades. En España el 40% de estas medicinas no se comercializa. La Federación Española de Enfermedades Raras reclama que se comercialicen y que se apoye la investigación.
Antón tiene 15 años y padece síndrome de ‘Morquio’. “Es un problema que afecta a los huesos y a los músculos”, cuenta Antón. Se trata de una enfermedad rara para la que existe tratamiento aprobado ya por la Agencia Europea de Medicamentos, pero que no se comercializa en España.
Esta es una realidad a la que se enfrentan muchas familias ya que el 40% de estos medicamentos para estas enfermedades huérfanas no se venden en nuestro país y hacen que se pierda un tiempo valioso cuando se lucha contra reloj. “Una vez que se sabe que el tratamiento es efectivo porque no seguir poniéndoselo. Que no llegan a un acuerdo eso es meramente burocrático”, explica Mari Paz Félix, madre de Antón.
Por ello desde las asociaciones de pacientes quieren poner de manifiesto que el no acceso a los tratamientos tiene consecuencias. “Saber que existe un fármaco y no aplicarlo crea mayor depresión en el paciente además crea daños irreversibles en muchas enfermedades que va a ser imposible recuperar”, explica Jordi Cruz, miembro de la Federación Española de Enfermedades Raras.
Algunas familias han tenido suerte como la de Nadia a la que sí le suministran las medicinas que necesita para su enfermedad. “Gracias a ese medicamento ella está aquí hoy y puede ir al colegio y hacer vida normal sino estaría cada dos días en el hospital en diálisis y tomado muchos medicamentos”, cuenta agradecida María Bang, madre de Nadia.
En España más de 3 millones de personas padecen alguna de las 7.000 enfermedades raras que hay en el mundo. Nuestra Seguridad Social solo financia 47 medicamentos para ellos.

miércoles, 17 de diciembre de 2014

Llegó el día... FELIZ

Ayer fue un día muy importante para mi y mi familia, empecé con las infusiones enzimáticas. es un tratamiento semanal y por el resto de mi vida, pero me alegra haberlo empezado ya que significa que me va a mejorar mi calidad de vida

  Mas adelante cuando me opere de la columna, en la misma
operación me van a poner un catéter en el pecho, y eso va a    evitar que cuando vaya al hospital me tengan que seguir pinchando por que directamente me conectan a la máquina y voy a tener las manos libres